Intente apresar una sola de tus curvas provocadoras
En mis manos corruptas de ese elixir
Que anega los desenfrenos del libertinaje
Y roce mis indignas pasiones en tu piel convulsionada.
Y cabalgue por los cerros de tus relieves
Explorando los secretos de tus senos desnudos,
Y manche con mis ardores tu obligo tentador
Besando las frontera de tus cavidades incitadoras
y empape mis labios con el perfume de tus emociones.
Y fue una noche de tantas, como de tantas enardecidas
Te hice mía al amparo de una vela,
Una copa de vino y el ritmo de alguna canción,
Y los escrúpulos extraviados en aquella habitación
Se cruzan en el umbral de tus secretos
y te hice mía tantas veces
Y quise encarcelarte en los deseos y postrarte sumisa
Mas descubro que tus caprichos me enternecen
Y vuelvo a caer como tantas noches en la manías de tu furor.
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